Querido amigo y maestro
Ya pasaron varios años desde que te fuiste tu espacio como ser humano y profesional estará vació por siempre porque eras un ser humano de excepción.
Tus pacientes buscan un sustituto y vuelven para preguntarme si no hay otro Sergio.
Me duele solo pensar las ganas que tenias de ver crecer a tu tres hijitos y .....................compartir tu tiempo con tu esposa.
Bueno amigo mucho de lo que soy hoy día te lo debo… por esas charlas y buenos consejos que me dabas y marcaron un camino.
Un abrazo grande a mi amigo Sergio.
Gustavo Hadad